El gobierno cubano ‘pretende chuparle al exilio como garrapata aferrada a su última gota de sangre’ dice el usuario que se identifica en redes sociales como Erick Saturno.

Diversos han sido los comentarios que han desatado la creación de tiendas en dólares en la isla, para cubanos de dentro y fuera. Los nacidos en la mayor de las Antillas, hablan de desigualdad, diferencias sociales, lucro con la necesidad de los demás e incluso con el sentimiento de protección que ejercen los ‘que se van’ por la familia que queda en Cuba.

Esta reflexión comparte algunos de esos puntos:

El régimen castrista quiere salvar la revolución pescando los dólares de los millones de cubanos que abandonaron el barco hundido del comunismo. Se enfocan en abrir tiendas con los productos sumamente necesarios que necesitan nuestras familias. Es como decirnos: si no me das tus dólares tu abuela, tu tía y tu madre se mueren de hambre.

Quieren nuestros dólares en sus bancos, cobrándonos bastante por la transferencia, sin permitirle a nuestra gente que saque el efectivo verde y poniéndole unos precios astronómicos a productos elementales. Algunos mandarán dinero, otros no; pero el fracaso anunciado consiste en querer “mantener” a un país con cuatro tiendas, contando centavos y sin darle la importancia y papel que se merece el cubano.

Un país se desarrolla con democracia, libre mercado y un pueblo motivado a consumir e invertir. El régimen parásito sobrevivió al fin de la URSS, al desmantelamiento de Venezuela; y ahora pretende chuparle al exilio como garrapata aferrada a su última gota de sangre.

Bueno, algunos comprarán. Otros no. Ni Juanita la miliciana, ni Pedrito el informante ni Yusisleidys la cederista podrán hacerlo tampoco. Algunos seguirán creyendo que se trata del Embargo. Otros, simplemente, no.

Lo bueno es que ya todo se sabe. El que quiera seguir cerrando los ojos es libre de hacerlo; aunque algún día despierte y vea que para comprar leche, en su propio país, necesita bitcoins. Otros, se darán cuenta que el autodenominado "gobierno socialista por todos y para el bien de todos" está lucrando con el hambre, el dolor familiar y el miedo de la gente. Y eso, amigos, también se agota.

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